Este verano volvimos a Navarra, pero esta vez, en la proximidad de Pamplona. A lo largo de la semana tuvimos tiempo para relajarnos tomando el sol y nadando en la piscina, paseando por el pueblo, acudiendo a los diferentes museos de la villa donde aprendimos cómo realizaban las telas nuestros antecesores. También para acercarnos al centro de la capital y visitamos la plaza de toros donde se celebran las famosas corridas de San Fermín.
¡Fue una semana muy divertida!








